Sheinbaum rechaza vinculación con protestas en EE.UU.

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, negó categóricamente cualquier llamado a protestas violentas en Estados Unidos, tras las recientes redadas migratorias en Los Ángeles que derivaron en la detención de más de 60 connacionales.

En su tradicional conferencia matutina del 11 de junio, Sheinbaum respondió a las declaraciones de la secretaria de Seguridad Nacional estadounidense, Kristi Noem, quien afirmó que la mandataria había instigado protestas. La presidenta describió esas versiones como “totalmente falsas” y exhortó a actuar con serenidad y prudencia en el ámbito diplomático.

Además de desmentir los señalamientos, Sheinbaum informó que 61 mexicanos fueron detenidos y que todos están en contacto con el consulado en Los Ángeles. “Se les está brindando apoyo consular y seguimiento”, indicó, resaltando la labor diplomática y humanitaria del gobierno.

La mandataria también criticó a algunos políticos y medios nacionales por propagar mensajes desinformados e incluso calificó esas acciones como “antipatriotas”.

Sheinbaum subrayó que su gobierno ha privilegiado el diálogo institucional frente a recriminaciones o confrontaciones. Señaló que una delegación de senadores viajó a Washington para rechazar una propuesta de impuesto a remesas y que el canciller y embajador mantuvieron labores diplomáticas con legisladores y agencias estadounidenses.

La mandataria adelantó que asistirá a la cumbre del G7 en Canadá (15‑17 de junio) y prevé abordar directamente con el presidente Trump los temas de migración, seguridad y comercio.

Sheinbaum destacó que el enfoque debe ser siempre diplomático y con cabeza fría, priorizando los derechos de los migrantes y evitando repercusiones diplomáticas negativas.

Este episodio refleja la complejidad de la relación bilateral México‑EE.UU.: por un lado, la defensa de los migrantes; por otro, la necesidad de mantener equilibrios diplomáticos ante una administración que impulsa políticas migratorias y arancelarias severas.